Kendall Jenner está desempaquetando algo más que su maleta en este viaje familiar.
De hecho, la modelo no solo pasó tiempo con sus hermanas Kim Kardashian, Khloé Kardashian y Kylie Jenner durante una reciente escapada a Cabo, sino que, para sorpresa de todos, también se unió a Corey Gamble, el novio de mamá Kris Jenner.
"Creo que el infierno se congeló", le dice Kris a Kim durante el episodio del 28 de septiembre de The Kardashians, "porque Corey y Kendall están charlando". Y ella no fue la única en shock, con Kim señalando, "No han hablado desde Palm Springs".
En caso de que no hayas estado al tanto de sus vacaciones familiares, retrocedamos un poco. En 2020, el equipo Kardashian-Jenner hizo un viaje a Palm Springs. Mientras estaban allí, Kendall y Kylie se pelearon explosivamente en un auto después de una noche de fiesta, y Kendall acusó a Corey de saltar para gritarle y maldecirla durante el drama.
Sin mencionar que las tensiones solo aumentaron a partir de ahí, ya que Corey llamó a Kendall "grosera" e "imbécil" durante una conversación siguiente.
Pero ahora, su enemistad es solo agua pasada, o deberíamos decir en la piscina, como se demostró durante su última excursión.
"Corey y yo fuimos cercanos por un tiempo y luego Kylie y yo tuvimos una pelea entre hermanas grandes y él trató de intervenir y eso causó un pequeño problema entre nosotros", dijo la joven de 27 años en un confesionario. "Nos disculpamos y lo superamos, pero en realidad nunca fue así, simplemente se quedó aquí", añadió, levantando la mano para indicar un movimiento neutral.
Sin embargo, su viaje a México resultó ser justo lo que necesitaban para seguir adelante.
"Creo que a veces eso es lo que hace que estos viajes familiares sean realmente importantes", dijo Kendall, "nos da a Corey y a mí la oportunidad de reducir el ritmo y pasar un tiempo juntos".
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